El dispositivo grupal de plantismo se propone elaborar una noción de tiempo en donde prima la espera: espera en movimiento, porque en ese -mientras tanto- se cuida. En esta relación de cuidados es donde se encuentra el valor simbólico de dicho dispositivo.
En un contexto donde prima la urgencia y lo individual como coordenadas de época, este espacio busca, a través del trabajo y cuidado que tanto las plantas como la huerta requieren, la construcción de otra temporalidad que posibilite una experiencia distinta a la dominante.